Cerrada la Vía y «recuperada» la humanidad tras la hecatombe nuclear, los cuarenta años transcurridos han alterado muchas cosas.
En la Tierra, Garry Lanier, líder de la primera expedición a Thistledown, ha envejecido y se ha convertido en un personaje cansado y amargado que desea morir. No obstante, todo cambiará con la llegada del general Pavel Mirsky, un ser que no puede existir ya que desapareció con la Vía y que ahora se presenta como mensajero de la Mente FInal del Universo.
En Gaia, donde el imperio de Alejandro Magno ha perdurado durante dos mil años, la joven Rhita Vaskayza examina la herencia de su enigmática abuela, la sophë Patrikia, llegada de una misteriosa puerta ya desaparecida y cuya reapertura puede traer el horror a un mundo tal vez inocente.
En Thistledown, el Hexamon Infinito desea reabrir la Vía. Konrad Korzenowski, asesinado precisamente por haberla creado y resucitado después para investigarla, no sabe qué hacer. Tal vez debería tener en cuenta la amenaza de los peligrosos jarts, unos enemigos que, como ser Olmy sabe, los humanos han subestimado lamentablemente.
Greg Bear
Eternidad
(Thistledown III)
ePUB v1.0
Rov05.07.11
Para David McClintock,
amigo, coadmirador de Olaf Stapledon,
y sobre todo librero.
Título: Eternidad
Título original:
Eternity
Serie: Thistledown III
Colección NOVA Éxito nº 12
Traductor: Carlos Gardini
© 1988; Greg Bear
© 1997; Ediciones B
ISBN: 84-406-7343-4
Edición digitad de Elfowar.
Corrección de Umbriel. Marzo de 2003.
Versión en ePub: Rov, Julio 2011
E
ÓN
fue el inicio de una curiosa trilogía cuya publicación cerramos con este libro. La historia de la serie es sencilla, aunque un tanto original.
Primero se publicó
E
ÓN
(
1985
, NOVA ciencia ficción,
número 90), una asombrosa especulación matemático-físico-cosmológica sobre el descubrimiento de un misterioso asteroide-nave llamado Thistledown, cuya Vía y sus puertas representan el posible camino de acceso a un multiverso de mundos. Algo más tarde, Bear escribió una interesantísima continuación que tiene poco que envidiar al primer volumen. Se trata de
E
TERNIDAD
(1988
, NOVA
éxito, número 12), la obra que hoy presentamos y que comentaremos más adelante. Los ingleses lo llaman una «sequel».
Pero en 1995, Bear rizó el rizo y publicó lo que en el mundo anglosajón se ha etiquetado como una «prequel» de
E
ÓN
.
Se trata de
L
EGADO
(1995
, NOVA éxito,
número 10), una novela que recupera elementos ya presentes en
E
ÓN
y
E
TERNIDAD
pero ambientada en un tiempo anterior. Aunque cronológicamente fue escrita después, la trama de
L
EGADO
se desarrolla antes. El mismo Thistledown, la Vía y sus puertas de que se habla en
E
ÓN
y
E
TERNIDAD
son el punto de arranque de una novela que, en su gran ambición especulativa, está centrada en la biología, un tema un tanto al margen de la serie formada por
E
ÓN
y
E
TERNIDAD
.
En cualquier caso, mi admiración por
L
EGADO
ha dado pie a que la trilogía completa aparezca en nuestras colecciones. En realidad, cuando
E
TERNIDAD
apareció en inglés, hacía tan sólo un año que se había publicado la edición española de
E
ÓN
.
No suelo seleccionar continuaciones si no hemos publicado el inicio de una serie, por eso ha habido que esperar hasta que
L
EGADO
(y el tiempo pasado...) me permitieron recuperar la serie completa. No obstante, respondiendo tal vez a la originalidad de la serie, la hemos publicado también de una forma un tanto curiosa.
Empezamos el año pasado con
L
EGADO
en el número 10 de la colección especial
NOVA éxito.
Seguimos después con el elemento central de la trilogía,
E
ÓN
,
que ha precedido sólo unos meses a su secuela explícita
:
E
TERNIDAD
.
Es decir, hemos optado por publicar la serie según su orden cronológico interno (si es que este factor tiene algún sentido en un lugar como la Piedra y su enigmática Vía...). Tal vez para reflejar el multiverso implícito en la serie, hemos usado no una, sino dos colecciones:
NOVA éxito
para los «estrenos» y la clásica
NOVA ciencia ficción
para la reedición de
E
ÓN
.
Si bien
L
EGADO
y
E
ÓN
tratan temas distintos (aunque emparentados por la Vía y el personaje ser Olmy)
,
E
TERNIDAD
es una continuación explícita de
E
ÓN
:
el mismo trasfondo, los mismos personajes, la misma situación ambientada unos cuarenta años después, etc. Imagino que
E
TERNIDAD
se puede leer con independencia de
E
ÓN
,
con sólo las referencias al multiverso de la Vía que ya he incluido en esta presentación.
En cierta forma,
E
TERNIDAD
resulta autosuficiente y uno de sus ejes arguméntales (el mundo Gaia y la herencia de Patricia Vasquez) aparece tan sólo en el último capítulo de
E
ÓN
.
La ya citada continuidad de los personajes aconsejaría tal vez una lectura ordenada, pero el objetivo de Greg Bear en esta novela parece ser otro. Por ello estoy bastante convencido de que
E
TERNIDAD
puede leerse independientemente, aun cuando no resultaría aconsejable: no leer
E
ÓN
es un error que el lector debería evitar
.
Si
E
ÓN
ha sido saludada como la «más bien construida de las novelas épicas de la ciencia ficción hard», emparentada con la «idea Rama» (una tecnología nueva, de gran envergadura y misteriosa en su origen, alcance y repercusión), también cabe verla como un ejemplo de la visión que Olaf Stapledon nos aportó con obras hoy ya clásicas como
H
ACEDOR DE ESTRELLAS
.
Tal como dice Paren Miller en
LOCUS: «Bear es uno de los pocos escritores de ciencia ficción capaz de continuar el camino seguido por Olaf Stapledon: más allá de los límites de la mera ambición humana y del tiempo geológico.
E
ÓN
era su novela más stapledoniana. ¿Cómo va a poder superarla?»
La respuesta es
E
TERNIDAD
,
que resulta aún más stapledoniana que
E
ÓN
y, en opinión de algunos críticos, incluso superior. Para muestra bien vale un botón: en el South Wales Argus podemos leer: «Si
E
ÓN
era magnífica (y lo era), su continuación la supera. Ideas apasionantes y un estilo innovador, dudo que hoy en día haya alguien que escriba mejor cualquier tipo de ficción.»
Ya el título
,
E
TERNIDAD
,
en palabras de Miller, «sugiere un salto en la escala todavía más espectacular, para abarcar algo capaz de imponer respeto incluso a los constructores de Thistledown». Y ese algo es el designio de los jarts y la aparición de un poder posiblemente omnímodo en esa Mente Final del universo.
En una entrevista realizada en 1989, el mismo Greg Bear (que parece haber estudiado mucha matemática para escribir estas novelas) nos transmitía su versión personal del famoso teorema de Gödel, junto con la razón de ser de
E
TERNIDAD
:
A grandes rasgos pienso que no podemos, y tal vez nunca podamos, alcanzar una comprensión adecuada del universo.
En
E
TERNIDAD
quise emprender un camino que no había seguido en
E
ÓN
: desarrollar una filosofía alienígena que pudiera ser comprendida e incluso aceptada, al menos de forma inconsciente, y que al mismo tiempo resultara revulsiva.
Estos dos elementos se dan cita en
E
TERNIDAD
.
Por una parte, el objetivo final de la actividad de los jarts ilustra ese tipo de filosofía alienígena que pretendía ofrecer Bear y, por otra parte, hay claras referencias a esa curiosa aplicación del teorema de Gödel que, en versión de Bear, vendría a justificar la inevitable inefabilidad del universo.
En algún lugar de este libro se dice explícitamente: «Un programa, por complejo que sea, incluso la mente humana, no siempre puede ser consciente del sistema en el cual opera», una especie de canto a ese misterio del universo en el que vivimos, que nos desborda de forma inevitable.
Pero, reflexiones filosófico-matemáticas al margen, la realidad es que Bear sabe «vestir» ese objetivo claramente expuesto con los elementos narrativos que hacen amena cualquier narración: personajes, misterios, sorpresas y un tema que bordea las grandes preguntas que se plantea todo ser vivo y consciente.
Para desarrollar el argumento, Bear imagina que han transcurrido cuarenta años desde los sucesos de
E
ÓN
.
Se ha cerrado la Vía y la humanidad de la Tierra ha sido «recuperada» tras la hecatombe nuclear. Pero la trama de
E
TERNIDAD
t
ranscurre en tres ámbitos principales:
En la Tierra, Garry Lanier, líder de la primera expedición a Thistledown, ha envejecido y se ha convertido en un personaje cansado y amargado que desea morir. No obstante todo cambiará con la llegada del general Pavel Mirsky, un ser que no puede existir ya que desapareció con la Vía, y que ahora se presenta como mensajero de la Mente Final del universo.
En Gaia, donde el imperio de Alejandro Magno ha perdurado durante dos mil años, la joven Rhita Vaskayza examina la herencia de su enigmática abuela, la sophé Patrikia, llegada de una misteriosa puerta ya desaparecida y cuya reapertura puede traer el horror a un mundo tal vez inocente.
En Thistledown, el Hexamon Infinito desea reabrir la Vía, y Konrad Korzenowski, asesinado precisamente por haberla creado y resucitado después para investigarla, no sabe qué hacer. Tal vez debería tener en cuenta la amenaza de los peligrosos jarts, unos enemigos de los que, como ser Olmy sabe, los humanos han subestimado lamentablemente.