Read Ulises Online

Authors: James Joyce

Tags: #Narrativa, #Clásico

Ulises (116 page)

BOOK: Ulises
11.85Mb size Format: txt, pdf, ePub
ads

Como físico había llegado a saber que de los 70 años de la vida humana completa por lo menos 2/7, esto es, 20 años, se pasaban en dormir. Como filósofo sabía que al terminarse la vida asignada a cualquiera sólo se había realizado una infinitésima parte de sus deseos. Como fisiólogo creía en el aplacamiento artificial de agentes malignos que actúan principalmente durante el sueño.

¿Qué temía?

Cometer homicidio o suicidio durante el sueño por una aberración de la luz de la razón, esa inconmensurable inteligencia categórica situada en las circunvoluciones cerebrales.

¿Cuáles eran habitualmente sus meditaciones finales?

Sobre algún anuncio, solo y único, que hiciera detenerse asombrados a los transeúntes, un cartel de novedad, excluidos todos los aditamentos extraños, reducido a sus términos más sencillos y eficaces sin exceder el alcance de la visión casual y en armonía con la velocidad de la vida moderna.

¿Qué contenía el primer cajón que abrió?

Un cuaderno de caligrafía Vere Foster, propiedad de Milly (Millicent) Bloom, algunas páginas del cual tenían dibujos diagramáticos marcados Papi, que mostraban una gran cabeza esférica con 5 pelos tiesos, 2 ojos de perfil, el tronco completamente de frente con 3 grandes botones, 1 pie triangular: 2 fotografías descoloridas de la reina Alejandra de Inglaterra y de Maud Branscombe, actriz y belleza profesional: una felicitación de Navidad, mostrando una representación pictórica de una planta parásita, el rótulo
Mizpah
, la fecha Navidad 1892, el nombre de los remitentes, del señor y la señora M. Comerford, y la aleluya
Ojalá esta Navidad te traiga felicidad
: un cabo de lacre rojo parcialmente liquefacto, obtenido de los almacenes de la empresa Hely’s Limited, calle Dame 89, 90 y 91: una caja que contenía el resto de una gruesa de plumillas «J», obtenidas del mismo departamento de la misma empresa: un viejo reloj de arena que se volcaba conteniendo arena que se volcaba: una profecía sellada (nunca abierta) escrita por Leopold Bloom en 1886 sobre las consecuencias de la aprobación del proyecto de Ley de Autonomía de William Ewart Gladstone, en 1886 (nunca aprobado como ley): un tíquet de tómbola N.° 2004, de la Feria de Beneficencia de San Kevin, precio 6 peniques, 100 premios: una epístola infantil, fechada lunes 1 minúscula, que decía: P mayúscula Papi coma ce mayúscula Como estas signo de interrogación y griega mayúscula Yo muy bien punto y aparte empezar párrafo firma con rúbrica eme mayúscula Milly sin punto: un broche de camafeo, propiedad de Ellen Bloom (nacida Higgins), fallecida: 3 cartas a máquina, dirigidas a Henry Flower, Lista de Correos Dolphin’s Barn: el nombre transliterado y la dirección de la remitente de las tres cartas en criptograma reservado alfabético boustrofedóntico puntuado cuatrilinear (suprimidas las vocales) N. IGS./ WI.UU.OX/W. OKS. MH/ Y. IM: un recorte de prensa de un semanario inglés
Modern Society
, tema el castigo corporal en las escuelas de niñas: una cinta rosa que había festoneado un huevo de Pascua el año 1899: dos preservativos de goma parcialmente desenrollados con bolsa de reserva, adquiridos por correo de Apartado 32, Lista de Correos, Charing Cross, Londres W. C: 1 paquete de 1 docena de sobres color crema y papel de cartas ligeramente rayado, con filigrana, ahora reducidos a 3: algunas monedas austrohúngaras variadas: 2 cupones de la Lotería con Privilegio Real de Hungría: una lente de aumento de baja potencia: 2 postales fotográficas eróticas representando:
a)
coito bucal entre
señorita
desnuda (presentación posterior, posición superior) y
torero
desnudo (presentación anterior, posición inferior):
b)
violación anal por religioso masculino (completamente vestido, ojos bajos) de religiosa femenina (parcialmente vestida, ojos directos), adquiridas por correo de Apartado 32, Charing Cross, Londres, W. C: un recorte de periódico de receta para la renovación de viejos zapatos claros: un sello adhesivo de 1 penique, lavanda, del reinado de la Reina Victoria: una tabla de medidas de Leopold Bloom compilada antes, durante y después de 2 meses de uso consecutivo del ejercitador de poleas Sandow-Whiteley (para hombres 15 chelines, para atletas 20 chelines), a saber, pecho 28 pulgadas y 29 1/2 pulgadas, bíceps 9 pulgadas y 10 pulgadas, antebrazo 8 1/2 y 9, muslo 10 pulgadas y 12 pulgadas, pantorrilla 11 pulgadas y 12 pulgadas: un prospecto del Milagroso, el mejor remedio del mundo para dolencias rectales, directamente del Milagroso, Coventry House, South Place, Londres E. C, dirigido a la Sra. L. Bloom con breve nota de acompañamiento que comenzaba: Querida Señora.

Cítense los términos textuales en que el prospecto afirmaba las ventajas de ese remedio taumatúrgico.

Cura y suaviza mientras usted duerme, en caso de dificultad de emisión de ventosidades, ayuda a la naturaleza del modo más formidable, asegurando instantáneo alivio en la descarga de gases, manteniendo limpias las partes con libre acción natural, una inversión inicial de 7 chelines y 6 peniques hará de usted un hombre nuevo y su vida digna de vivirse. Las señoras encuentran especialmente útil el Milagroso, una grata sorpresa cuando advierten el delicioso resultado como un fresco sorbo de agua de manantial en un bochornoso día de verano. Recomiéndeselo a las señoras y señores de su amistad, dura toda una vida. Insértese por el lado redondo largo. Milagroso.

¿Había testimonios?

Numerosos. De eclesiástico, oficial de la armada británica, escritor famoso, hombre de negocios, enfermera de hospital, señora, madre de cinco, mendigo distraído.

¿Cómo concluía el testimonio conclusivo del mendigo distraído?

¡Qué lástima que el Gobierno no proveyera a nuestros hombres con Milagrosos durante la campaña sudafricana! ¡Qué alivio habría sido!

¿Qué objeto añadió Bloom a esta colección de objetos?

Una cuarta carta a máquina recibida por Henry Flower (supongamos que H. F. sea L. B.) de Martha Clifford (averígüese M. C).

¿Qué grata reflexión acompañó esta acción?

La reflexión de que, aparte de la carta en cuestión, el magnetismo de su cara, figura y modo de presentarse había sido favorablemente recibido durante el transcurso del día anterior por una esposa (señora Josephine Breen, nacida Josie Powell), una enfermera, señorita Callan (nombre de pila desconocido), una muchachita, Gertrude (Gerty, apellido desconocido).

¿Qué posibilidad se sugería por sí misma?

La posibilidad de ejercer un viril poder de fascinación en el futuro más inmediato tras lujoso banquete en habitación reservada en compañía de elegante cortesana, de belleza corporal, moderadamente mercenaria, diversamente instruida, una señora por su origen.

¿Qué contenía el segundo cajón?

Documentos: el certificado de nacimiento de Leopold Paula Bloom: una póliza de seguro dotal de £ 500 en la Sociedad de Seguros La Viuda Escocesa a nombre de Millicent (Milly) Bloom, entrando en vigor a los 25 años con beneficios de £ 430, £ 462-10-0 o £ 500 a los 60 años y fallecimiento, 65 años y fallecimiento y fallecimiento respectivamente, o como póliza con beneficio (completamente pagada) de £ 299-10-0 junto con pago en efectivo de £ 133-10-0, como opción: una libreta de depósito bancario emitido por el Ulster Bank, sucursal College Green, mostrando declaración de cuenta para el semestre terminado el 31 de diciembre de 1903, saldo a favor del depositario: £ 18-14-6 (dieciocho libras catorce chelines y seis peniques), haber líquido: certificado de propiedad de títulos canadienses del Gobierno (nominales) al 4 % por £ 900 (exentos de timbre): cédulas de la Comisión de Cementerios Católicos (Glasnevin) en relación con un terreno para sepulturas adquirido: un recorte de un periódico local referente a un cambio de nombre por acta unilateral.

Cítense los términos textuales de este aviso.

Yo, Rudolf Virag, ahora residente en la calle Clanbrassil n.° 52, Dublín, antes de Szombathely en el reino de Hungría, notifico por la presente que he asumido y me propongo en lo sucesivo en toda ocasión y en todo momento ser conocido por el nombre de Rudolph Bloom.

¿Qué otros objetos referentes a Rudolph Bloom (nacido Virag) había en el segundo cajón?

Un confuso daguerrotipo de Rudolph Virag y su padre Leopold Virag ejecutado el año 1852 en el taller de retratos de su (respectivamente) primo y sobrino segundo, Stefan Virag de Szesfehervar, Hungría. Un antiguo libro de la Hagadah en que unas gafas convexas de montura de concha señalaban el pasaje de acción de gracias en las oraciones rituales del Pessach (Pascua): una postal fotográfica del Queen’s Hotel, Ennis, propietario, Rudolph Bloom: un sobre dirigido
A mi querido hijo Leopold
.

¿Qué fragmentos de frases evocó la lectura de esas cinco palabras enteras?

Mañana hará una semana que recibí… no sirve Leopold ser… con tu querida madre… esto no se aguanta más… para ella… todo ha terminado para mí… sé bueno con
Athos
, Leopold… querido hijo mío… siempre… en mí…
das Herz

Gott

dein

¿Qué reminiscencias de un ser humano sufriendo melancolía progresiva evocaron esos objetos en Bloom?

Un viejo viudo, pelo desordenado, en la cama, con la cabeza cubierta, suspirando: un perro inválido, Athos: acónito, utilizado en crecientes dosis de granos y escrúpulos como paliativo de una neuralgia recrudecida: la cara tras la muerte de un septuagenario suicida por veneno.

¿Por qué experimentó Bloom un sentimiento de remordimiento?

Porque con impaciencia inmadura había tratado con poco respeto ciertas creencias y prácticas.

¿Tales como?

La prohibición del uso de la carne y la leche en la misma comida, el simposio hebdomadario de excompatriotas excorreligionarios incoordinadamente abstractos, fervorosamente concretos en lo mercantil: la circuncisión de los nimios varones: el carácter sobrenatural de las escrituras judaicas: la infalibilidad del tetragrámmaton: la santidad del sábado.

¿Cómo le parecían ahora estas creencias y prácticas?

No más racionales de lo que entonces le habían parecido, no menos racionales de lo que ahora le parecían otras creencias y prácticas.

¿Qué primera reminiscencia tenía él de Rudolph Bloom (fallecido)?

Rudolph Bloom (fallecido) narraba a su hijo Leopold Bloom (edad 6 años) una reordenación retrospectiva de emigraciones y asentamientos en y entre Dublín, Londres, Florencia, Milán, Viena, Budapest y Szombathely, con expresiones de satisfacción (habiendo visto su abuelo a María Teresa, emperatriz de Austria, reina de Hungría), con consejos comerciales (habiendo cuidado el penique, las libras esterlinas se habían cuidado de sí mismas). Leopold Bloom (edad 6 años) había acompañado esas narraciones con una constante consulta de un mapa geográfico de Europa (político) y con sugerencias de establecer sucursales de negocios en los diversos centros mencionados.

¿Había borrado el tiempo igualmente pero de modo diverso el recuerdo de esas emigraciones en el narrador y el oyente?

En el narrador, por la acumulación de los años y a consecuencia del uso de la toxina narcótica: en el oyente, por la acumulación de los años y a consecuencia de la acción de la distracción en experiencias en cabeza ajena.

¿Qué idiosincrasias del narrador eran productos concomitantes de la amnesia?

Ocasionalmente comía sin haberse quitado previamente el sombrero. Ocasionalmente tomaba vorazmente el jugo de las fresas con nata del plato inclinado. Ocasionalmente se quitaba de los labios los restos de alimento por medio de un sobre roto u otro fragmento accesible de papel.

¿Qué dos fenómenos seniles eran más frecuentes?

El miópico cálculo digital de monedas, la eructación subsiguiente a la repleción.

¿Qué ofrecía consuelo parcial para esos recuerdos?

La póliza dotal, la libreta de depósito bancario, el certificado de propiedad de los títulos.

Redúzcase a Bloom, mediante multiplicación cruzada de reveses de fortuna, de que esos sostenes le defendían, y mediante eliminación de todos los valores positivos, a una cantidad despreciable negativa irracional irreal.

Sucesivamente, en orden descendente de ilotismo: Pobreza: la del vendedor ambulante de bisutería, el cobrador de deudas dudosas, el exactor del impuesto de beneficencia y de sanidad. Mendicidad: la del quebrado fraudulento con bienes despreciables que paga 1 chelín y 4 peniques por fibra, hombre–sándwich, distribuidor de prospectos por ahí, vagabundo nocturno, adulador entrometido, marinero mutilado, muchacho ciego, ayudante superfluo de jefe de policía, aguafiestas, lameplatos, latoso, pícaro, excéntrico hazmerreír público sentado en un banco del parque público bajo un paraguas agujereado sacado de la basura. Abandono: el asilado en el Hogar de Ancianos (Royal Hospital), Kilmainham, el asilado en el Hospital Simpson para caballeros venidos a menos pero respetables incapacitados permanentemente por la gota o la falta de vista. Nadir de la desgracia: el anciano indigente inválido sin derechos sustentado por la beneficencia moribundo lunático.

¿Con qué acompañamiento de indignidades?

La indiferencia sin compasión de hembras previamente amables, el desprecio de los varones musculosos, la aceptación de fragmentos de pan, la simulada ignorancia de conocidos casuales, el ladrido de perros ilegítimos y sin licencia, el lanzamiento infantil de proyectiles vegetales descompuestos, por valor de nada o menos que nada.

¿Con qué podría evitarse tal situación?

Con el fallecimiento (cambio de estado), por la partida (cambio de lugar).

¿Cuál, preferiblemente?

Lo segundo, por la línea de menor resistencia.

¿Qué consideraciones hacían esto no enteramente indeseable?

La constante cohabitación que impedía la mutua tolerancia de defectos personales. El hábito de adquisición independiente cada vez más cultivado. La necesidad de compensar con la residencia no permanente la permanencia de la detención.

¿Qué consideraciones lo hacían no irracional?

Las partes en cuestión, unidas, se habían aumentado y multiplicado, una vez hecho lo cual, producida posteridad y educada hasta la madurez, esas partes, si ahora desunidas, estaban obligadas a volverse a unir para aumento y multiplicación, lo que era absurdo, o a formar por nueva unión la pareja original de las partes a unir, lo que era imposible.

¿Qué consideraciones lo hacían deseable?

BOOK: Ulises
11.85Mb size Format: txt, pdf, ePub
ads

Other books

Spring Equinox by Pendragon, Uther
Murder Spins the Wheel by Brett Halliday
The Testing by Jonathan Moeller
Gravelight by Marion Zimmer Bradley
Village Matters by Shaw, Rebecca
1805 by Richard Woodman
Blood of Cupids by Kenzie, Sophia