Hay dos tipos básicos de células madre: las embrionarias y las adultas. Las primeras son pluripotenciales, es decir, pueden evolucionar hasta convertirse en cualquier tipo de célula. Por lo general proceden de óvulos fertilizados que fueron descartados en un tratamiento de fertilidad. Cuando se fertiliza un óvulo, éste empieza a dividirse. Tras aproximadamente cinco días, se ha convertido en una colección de unas 150 células que se denomina blastocisto. Las células centrales del blastocisto son células madre pluripotenciales. Se sabe muy poco sobre los usos que se podrían dar a las células madre embrionarias humanas. Los científicos aprendieron a cultivarlas en laboratorio en 1998, pero desde entonces se han desarrollado leyes que restringen esas investigaciones. No obstante, los científicos han estado utilizando células madre adultas con fines terapéuticos desde hace más de tres décadas.
Las células madre adultas se pueden encontrar en muchos puntos del cuerpo (la piel, el cerebro y la médula ósea), pero no son tan versátiles como las embrionarias. Son multipotenciales, es decir, sólo pueden convertirse en un número determinado de células de familias muy cercanas. Así, las células madre de la médula ósea sólo puede formar células de hueso, de cartílago y de grasa. Sin embargo, al contrario que las células madre embrionarias, cuyo origen es una fuente externa, las células adultas a menudo proceden del cuerpo del mismo paciente, por lo que hay menos probabilidades de que el sistema inmunológico acabe rechazándolas.
OTROS DATOS DE INTERÉS
1.
Los folículos capilares también contienen células madre, y algunos investigadores creen que esas células podrán curar la calvicie en el futuro.
2.
Se ha empleado células madre procedentes de la médula espinal para tratar la leucemia y el linfoma desde la década de 1970.
3.
Mediante el uso de células madres, algunos científicos han conseguido regenerar dientes que faltaban en ratones.
Viernes, día 5
SEMANA 26
MÚSICA
E
n 1792, Ludwig van Beethoven (1770-1827) comenzó a estudiar con Franz Joseph Haydn y posteriormente con Antonio Salieri. Beethoven era un pupilo arrogante e impertinente famoso por sus improvisaciones apasionadas al piano. Muchos críticos afirman que alcanzó la madurez como compositor cuando aprendió a combinar su celo y amor por la música con la lógica de las formas clásicas.
El estricto respeto a las formas clásicas de Beethoven llegó a su fin en 1810, cuando se sumió en la más profunda desesperación y alienación debido a sus graves problemas de salud, la pérdida de audición y su soledad. Tocó el piano por última vez en 1814, y desde 1819 todas sus conversaciones fueron con notas escritas.
Fue en esta situación, en los últimos años de su vida, cuando Beethoven escribió la Sinfonía nº 9,
Coral
(1824), una expresión admirable de su pasión creativa plasmada sobre la partitura cuando ya estaba completamente sordo, y una última demostración de su amor por la música y de su pasión artística.
La pieza, de más de una hora de duración, está compuesta por cuatro movimientos que comienzan con una apertura dramática adherida sólo de refilón a la fórmula clásica. Conduce a un movimiento lento y ligero de
scherzo
(una forma de baile), y a continuación llega una sección de
adagio
lento, un momento de tranquilidad extenso, delicado, casi prudente, antes de que irrumpa la tormenta final.
El movimiento final de la sinfonía
Coral
es uno de los más grandiosos finales de todos los tiempos y es conocido prácticamente en todo el mundo. Es la primera vez en la que una sinfonía recurre a toda una coral junto a la orquesta al completo. Cuando el coro empieza a interpretar la
Oda a la alegría
, un himno extático a la vida, la música va creciendo lentamente hasta el movimiento de clímax eufórico y atronador.
OTROS DATOS DE INTERÉS
1.
El texto de la
Oda a la alegría
en la que se incluyen frases como «¡Alegría, hermosa chispa de los dioses, hija del Elíseo! ¡Ebrios de ardor penetramos, diosa celeste, en tu santuario!», tiene su origen en un poema de 1785 del poeta alemán Eriedrich Schiller.
2.
Según la leyenda, cuando Beethoven se moría, al poco de terminar la Sinfonia
nº 9,
hubo una tormenta en Viena. El compositor yacía inconsciente sobre su cama, y en el momento en el que sonó un relámpago, se incorporó de repente, agitó su puño hacia el cielo y cayó sin vida.
Sábado, día 6
SEMANA 26
FILOSOFÍA
E
l contrato social es un concepto de la filosofía política utilizado para comprender el origen y la legitimidad de los sistemas políticos.
La idea que subyace tras el contrato social es que en algún punto hipotético del pasado los seres humanos no tenían ni gobiernos ni leyes. Para proteger su bienestar físico y crear las condiciones apropiadas para la prosperidad, llegaron a un acuerdo: a cambio de la estabilidad y la seguridad que proporcionan las leyes, todo el mundo tenía que ceder parte de sus libertades originales a un gobierno.
El primer teórico moderno del contrato social fue Thomas Hobbes (1588-1679). En su obra
Leviatán
(1651), el filósofo muestra cómo era la vida antes de que hubiese gobiernos, lo que él llamaba «estado de naturaleza», y lo describía como «solitario, sucio, pobre, embrutecido y limitado». La única opción racional era establecer un contrato social en el que la gente perdiera autoridad frente al dirigente. Según Hobbes, el estado de naturaleza era tan malo que no importa lo tiránico o arbitrario que sea un dirigente, es preferible a eso. Por lo tanto, la gente no tiene derecho a rebelarse. Hobbes iba más allá y defendía que el soberano debe tener un poder incondicional y absoluto sin contrapoderes.
El filósofo inglés John Locke (1632-1704) argumentaba que el contrato social tenía que hacer algo más que proteger la integridad física del pueblo: también debía respetar los derechos del individuo a la vida, la libertad y la propiedad. Si la autoridad política constituida a raíz del contrato social violaba estos derechos, Locke creía que los ciudadanos tenían derecho a anular el contrato y rebelarse. Otro teórico destacado del contrato social fue Jean-Jacques Rousseau (1712-1778).
OTROS DATOS DE INTERÉS
1.
El filósofo alemán Immanuel Kant (1724-1804) pensaba que el hombre no puede desarrollar su máximo potencial si no vive en un entorno civil. Defendía por tanto que estamos obligados a dejar el estado de naturaleza y establecer un contrato social.
2.
Las ideas políticas de Rousseau tuvieron mucha influencia en la Revolución francesa.
Domingo, día 7
SEMANA 26
RELIGIÓN
A
principios del siglo XVI, cuando gran parte de Europa estaba descontenta con la Iglesia católica romana, Martín Lutero instigó la Reforma protestante.
Martín Lutero, profesor y sacerdote en Alemania, había estudiado en profundidad los textos religiosos. Su primer desacuerdo con la Iglesia católica tenía que ver con la utilización de las indulgencias. Las indulgencias eran una tradición católica para el perdón de los pecados. En aquel tiempo, las indulgencias estaban a la venta. A cambio de dinero se reducía la condena al purgatorio del donante. Lutero se oponía a la idea de comprar la salvación, argumentando que suponía un grave quebranto de la fe.
En 1517, Lutero colgó sus 95 tesis en la puerta de la iglesia de Wittenburg donde retaba a la Iglesia católica y ponía en duda la legitimidad del papa, así como la utilización de las indulgencias. Lutero creía que la Iglesia había olvidado sus doctrinas originales, especialmente las procedentes directamente de la Biblia, y había creado una cuña innecesaria entre el clero y los feligreses.
Al hacer públicas sus 95 tesis, Lutero encendió la chispa de un importante debate que se propagó a gran velocidad por el resto de Alemania, Suiza, Austria, Inglaterra y Escocia. A medida que el debate iba extendiéndose por el mundo, los escritos de Juan Calvino, entre otros, alimentaron aún más el número de disidentes entre la población europea.
A medida que las creencias de los distintos reformadores fueron coincidiendo con el paso del tiempo, la religión protestante adquirió forma. En el corazón de esta fe reformista estaba la idea de que la única autoridad religiosa era la propia Biblia y no el papa. Esto supuso una revolución para la estructura de la Iglesia y hacía hincapié en que los individuos podían relacionarse con Dios más directamente, sin tener a los sacerdotes como intermediarios.
Con el tiempo los protestantes se fragmentaron en muchas sectas, tales como los luteranos, los calvinistas y los anabaptistas, y los católicos lanzaron una Contrarreforma y adoptaron una línea más conservadora.
OTROS DATOS DE INTERÉS
1.
Cuando tenía 22 años Martín Lutero volvía de la escuela en un día de tormenta. Cuando un relámpago cayó a su lado, exclamó: «¡Ayuda, santa Ana! ¡Me haré monje!». Sobrevivió y mantuvo su promesa dejando sus estudios de derecho para entrar en un monasterio.
2.
La Reforma protestante encontró un gran apoyo en el rey inglés Enrique VIII que separó a su país de la Iglesia católica en 1529. El rey se autoproclamó jefe de la Iglesia inglesa, y pudo así divorciarse de su esposa, la reina Catalina, algo que el papa no hubiese permitido.
3.
Aunque no hay ninguna prueba de la existencia del original de las 95 tesis, muchos expertos creen que la idea de colgar el documento en la puerta de la iglesia no estaba mal encaminada. En aquel tiempo, las puertas de las iglesias y de la universidad se utilizaban para poner avisos del mismo modo que se utilizan los tablones de anuncios en la actualidad.
Lunes, día 1
SEMANA 27
HISTORIA