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Authors: Matthew Reilly

Tags: #Intriga, #Aventuras, #Policíaco

La lista de los doce (49 page)

BOOK: La lista de los doce
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Entonces esa nueva lista adquirió otra nueva dimensión.

Los misiles clonados que iban a ser lanzados a Pekín y Hong Kong desde el Hopewell eran clones del Sky Horse taiwanés. También iban provistos de cabezas nucleares estadounidenses.

Mientras que los misiles que iban a ser lanzados desde el Whale a Nueva Delhi eran clones del Ghauri-II pakistaní y los que serían disparados a Islamabad eran réplicas del Agni-II indio.

—Joder… —murmuró Schofield.

¿Cómo reaccionaría china a un ataque nuclear taiwanés?

Muy mal
.

¿Y cómo reaccionarían Pakistán y la India ante un bombardeo nuclear mutuo?

Muy, muy mal
.

Schofield frunció el ceño.

No comprendía por qué esa lista era diferente a la de Libro.

Vale, piensa. ¿De dónde sacó Libro la lista original
?

Del agente del Mossad, Rosenthal, que se había hecho con ella durante su vigilancia del M-12
.

¿De dónde he obtenido yo la mía
?

Schofield intentó recordarlo.

—Joder… —dijo cuando cayó en la cuenta.

La había recibido en su Palm Pilot cuando Gant y él habían estado sentados en la antesala de piedra de la fortaleza de Valois, esperando mientras Aloysius Knight estaba en el despacho de
monsieur
Delacroix, accediendo de manera inalámbrica a su ordenador.

Schofield se volvió hacia Knight.

—Cuando estuvo con Delacroix en el castillo, ¿dijo algo acerca del despacho en el que estaban?

Knight se encogió de hombros.

—Sí. Dijo que ese no era su despacho. Que pertenecía al propietario del castillo.

—Killian —dijo Schofield.

—¿Por qué?

Pero ahora Schofield lo comprendía.

—Debe de haber otro ordenador en ese despacho. En un cajón o en otra mesa —aventuró—. Usted mismo lo dijo. Su Palm Pilot extrae documentos de cualquier ordenador de la habitación. Cuando inició el programa, captó documentos de otro ordenador del despacho. El ordenador de Killian.

—Sí. ¿Y?

Schofield sostuvo en alto la nueva lista.

—Este no es el plan del M-12. Su plan implica provocar una nueva guerra fría mundial contra el terrorismo. El M-12 quiere que misiles terroristas, Shahabs y Taep’o-Dongs, impacten en las principales ciudades. Razón por la que dejaron los cuerpos de los hombres de Global Jihad en la planta de Axon. Y los superpetroleros, para que el mundo pensara que los terroristas habían robado los barcos Kormoran.

»Pero esta lista muestra algo totalmente diferente. Muestra que la compañía de Killian instaló misiles Camaleón diferentes en los buques Kormoran, no los que el M-12 esperaba. Killian está planeando algo mucho peor que una guerra mundial contra el terrorismo. Lo ha dispuesto todo para que parezca que las principales potencias del mundo sean atacadas por su enemigo más odiado.

»Occidente objeto de atentados terroristas. India y Pakistán entre sí. China por misiles taiwaneses.

Schofield abrió de repente los ojos de par en par.

—Es la idea complementaria de Killian. Ese no es el plan del M-12. Es el plan de Killian. Y no provocará ninguna guerra fría, sino algo mucho peor. Una guerra mundial, total. Una guerra que llevará la anarquía al mundo.

Rufus dijo:

—¿Está diciendo que Killian ha estado engañando a sus ricachones compañeros del M-12?

—Exactamente —dijo Schofield.

Entonces recordó las palabras que Killian pronunció en la fortaleza de Valois: «Aunque muchos no lo sepan aún, el futuro mundial se encuentra en África».

—El futuro mundial se encuentra en África —citó Schofield—. Había soldados africanos en los dos barcos. Eritreos. Nigerianos. Oh, mierda. ¡Mierda! Cómo no lo he visto antes…

Schofield abrió otro de los documentos de su Palm Pilot:

ITINERARIO EJECUTIVO

El orden de viaje propuesto es el siguiente: Asmara (01/08), Luanda (01/08), Abuya (05/08), Yamena (07/08) y Tobruk (09/08).

01/08 —Asmara (embajada).

03/08 —Luanda (estancia con el Sr. Loch, sobrino de R).

Era el itinerario del viaje que Killian había realizado por África el año anterior.

Asmara: la capital de Eritrea
.

Luanda: la capital de Angola
.

Abuya: Nigeria
.

Yamena: Chad
.

Y Tobruk: el emplazamiento de la mayor base de la Fuerza Aérea de Libia
.

Killian había estado abriendo fábricas y forjando alianzas con cinco naciones africanas clave.

Pero ¿por qué
?

Schofield habló:

—¿Qué ocurriría si las principales potencias del mundo se involucraran en una guerra anárquica? ¿Qué le pasaría al resto del mundo?

—Se ajustarían algunas cuentas pendientes, eso seguro —dijo Knight—. Las guerras étnicas se reavivarían. Los serbios irían tras los croatas, los rusos borrarían de la faz de la Tierra a los chechenos, por no mencionar a todos los que quieren acabar con los kurdos. Luego estarían los oportunistas, como los japoneses en la segunda guerra mundial. Países que sacarán provecho de la situación para hacerse con recursos o territorios: Indonesia invadiría de nuevo Timor Oriental…

—¿Qué hay de África? —inquirió Schofield—. Estoy pensando en el documento de planificación Q-309 del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos.

—Uau… —Knight estaba asombrado.

Schofield recordaba aquella directriz palabra por palabra.

—«Si aconteciere un conflicto en el que estuvieran implicadas las principales potencias mundiales, es muy probable que las poblaciones de África, Oriente Medio y Centroamérica (algunas de las cuales sobrepasan la población de sus vecinos occidentales en una proporción de cien a uno) acudieran en tropel a nuestras fronteras de Occidente y que las ciudades occidentales se vieran desbordadas».

La Q-309 era una política basada en la historia, en una larga historia de élites acaudaladas y caprichosas que habían caído ante clases inferiores más pobres pero numéricamente superiores: la caída de Roma ante los bárbaros, la revolución francesa y ahora el mundo occidental sucumbiendo a las masas del tercer mundo.

Dios mío
, pensó Schofield.

Una guerra mundial y anárquica proporcionaría la oportunidad perfecta para que el tercer mundo se alzara.

Y, si Killian había prevenido a algunas naciones africanas, entonces…

No, no es posible
, protestó el cerebro de Schofield.
Por el simple motivo de que el plan de Killian no es lo suficientemente grande
.

No garantizaba una anarquía mundial total.

Y entonces Schofield vio la entrada final de la lista de los misiles, la entrada que no había figurado en la lista de Libro, una entrada según la cual un misil sería disparado dos horas después que los demás.

Abrió de nuevo el documento:

Un clon del Jericho-2B
, pensó Schofield.
El Jericho es un misil balístico de largo alcance perteneciente a Israel; y este iba provisto de una cabeza nuclear estadounidense W-88
.

¿Y el objetivo?

Valiéndose del mapa de Libro, Schofield marcó las coordenadas GPS del objetivo.

Su dedo se posó en el mapa… y, al hacerlo, Schofield sintió cómo un gélido escalofrío le recorría todo el cuerpo.

—Que Dios se apiade de todos nosotros —acertó a decir mientras contemplaba el objetivo.

El último misil clonado, de origen israelí y con una cabeza nuclear estadounidense, apuntaba a un objetivo en Arabia Saudí:

La ciudad sagrada de la Meca.

6.14

La cabina quedó en el más completo silencio.

La mera idea era demasiado bestial, demasiado impactante como para contemplarla siquiera. Un misil israelí provisto de una cabeza nuclear estadounidense atacando la ciudad más sagrada de los musulmanes en el día más sagrado para ellos.

En el mundo posterior al 11 de Septiembre, no podría haber una acción de mayor provocación.

Desencadenaría un caos mundial, ningún ciudadano o embajada o negocio estadounidense estaría a salvo. En todas las ciudades de todos los países, los musulmanes clamarían venganza.

Desataría una guerra mundial entre los musulmanes y Estados Unidos. El primer conflicto mundial entre una religión y una nación que, en sí mismo, sería el precursor de una revolución global total: la tercera guerra mundial.

—Dios, el 26 de octubre, lo he tenido delante de mis narices todo este tiempo —dijo Schofield—. El primer día del Ramadán. No había pensado siquiera en la posible importancia o no de la fecha. Killian ha escogido el día de mayor provocación.

—Entonces, ¿desde dónde se va a disparar? —preguntó Knight.

Schofield ubicó rápidamente las coordenadas del lugar donde se lanzaría el último misil Camaleón… y frunció el ceño.

—No será lanzado desde un barco —dijo—. La ubicación es en tierra. Desde algún lugar de Yemen.

—¿Yemen? —preguntó Rufus extrañado.

—Hace frontera con Arabia Saudí al sur. Está muy cerca de la Meca —aclaró Knight.

—Yemen… —dijo Schofield mientras lo reflexionaba—. Yemen…

En algún momento de ese día había oído algo sobre Yemen, algo que estaba situado en el interior de Yemen…

Lo recordó.

—Hay un clon del Krask-8 en Yemen —dijo.

Había sido al principio de todo aquello, durante la misión en el complejo Krask-8. Durante la guerra fría, los soviéticos habían construido instalaciones para misiles balísticos intercontinentales idénticos al complejo Krask-8 en sus estados satélite: estados como Siria, Sudán y Yemen.

El cerebro de Schofield comenzó a funcionar a toda velocidad
.

El complejo Krask-8 había sido adquirido por Atlantic Shipping Company. David Fairfax lo había averiguado
.

Y Atlantic Shipping Company
, ahora lo sabía,
era una filial de Axon Corp
.

—Mierda —maldijo Schofield—. Rufus, ponga rumbo sudeste y pise a fondo. Posquemadores todo el camino.

Rufus lo miró vacilante.

—Capitán, no quiero ser tosco pero, incluso volando a toda velocidad, no hay manera posible de llegar desde aquí a Yemen en dos horas. Es un viaje de seis mil kilómetros, al menos cuatro horas de viaje. Además, si usamos los posquemadores todo el tiempo, nos comeremos el combustible antes de llegar siguiera a los Alpes franceses.

—No se preocupe por eso —dijo Schofield—. Puedo disponerlo todo para que nos suministren combustible durante el vuelo. Y no vamos a ir todo el trayecto a Yemen en este avión.

—Como usted diga —accedió Rufus finalmente, y puso rumbo al sudeste con los posquemadores activados.

Mientras todo eso ocurría, Schofield habló por el micrófono por satélite.

—Señor Moseley, ¿sigue ahí con nosotros?

—Por supuesto que sí —fue la respuesta desde Londres.

—Necesito que efectúe una investigación de los activos de una compañía por mí. Se llama Atlantic Shipping Company. Busque cualquier terreno que tenga en propiedad en Yemen, especialmente antiguos emplazamientos soviéticos.

»También necesito dos cosas más: primero, necesito autorización para atravesar el espacio aéreo europeo, además de varios reabastecimientos en el aire. Le enviaré nuestra señal transpondedora.

—De acuerdo. ¿Y lo segundo?

—Necesito que abastezca de combustible a dos aviones estadounidenses muy especiales. En estos momentos se encuentran en el Aerostadia Italia, en Milán.

6.15

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