Sex code (31 page)

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Authors: Mario Luna

Tags: #Autoayuda

BOOK: Sex code
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DeAngelo concluye que aquí habría terminado de estropearlo. Personalmente, me gusta mucho este fragmento, porque creo que puede ayudarnos bien a entender la enorme diferencia de comportamiento que se da entre el Frusco y el Chulifresco Divertido.

COMPORTAMIENTOS Y SALIDAS TÍPICAS DEL CHULIFRESCO

Paso, sin más dilación, a compartir contigo algunas de las actitudes y reacciones propias del Chulifresco. Espero que te inspiren. Las escribo en negrita para que te resulte más cómodo repasarlas
[226]
.

—Actúa con total y absoluta familiaridad, como si conocieses a la otra persona de toda la vida, aun cuando no la conozcas lo más mínimo o la situación no te permita tener confianza con ella en teoría.

—Actúa como si tuvieses la total seguridad de que ella está por ti secretamente.

—Haz comentarios del tipo: «Muy bien, sigue así…», «Venga, tú puedes» o «No te preocupes, has hecho lo correcto» con cierto recochineo y desde una posición de superioridad, como si fuese un niño pequeño inseguro que necesitase ser reasegurado todo el tiempo. Tú actúas como ese adulto en el que confía que le ofrece indicaciones, ánimos y estímulos cuando es necesario.

—Desarrolla una cara y gestos de desaprobación y asco reprimido de la que puedas echar mano en momentos clave.

—Haz de frases como: «Lo siento, estoy cogido» parte de tu vocabulario. Pueden usarse en cualquier momento, pero resultan especialmente eficaces a los dos minutos de haberla conocido, cuando te ofrece las primeras muestras de atención.

—Si, utilizando como pretexto tus Accesorios Sexuales, te dice algo como: «Hey, me gusta tu estilo», utiliza respuestas del tipo: «No, te gusto yo».

—Cuando te toque: «Manos fuera, ¿eh? La mercancía no es gratis». O «Se mira, pero no se toca». Puedes alternar esto con mirarla acusadoramente cada vez que te toca, llevando la vista al lugar tocado.

—Si por ejemplo te dice: «Creo que es hora de acostarse», contesta con algo como: «¿Tan pronto? ¿Ni siquiera sé aún si sabes besar y ya intentas arrastrarme hacia tus sábanas?» O también: «Oye, ¿por qué no nos hacemos amigos primero?».

—«¿Te he dicho alguna vez el increíble trabajo que estás haciendo?» Pausa. «Hay una razón» o «Pues alguna razón habrá». O también: «¿Sabes? Me encantaría decirte el brillante trabajo que estás haciendo». Pausa. (Ella dirá algo como: «¿En serio?») «Pero no me hago el ánimo» (dando a entender con tu lenguaje corporal que se trata de una mentira demasiado grande para tus escrúpulos).

—Cuando hace un ejercicio de autocrítica o de Humor Autodegradante, potenciar dicho aspecto en lugar de negarlo. Corona su comentario con algo como: «Bueno, ya puestos yo también añadiría que… (un defecto), pero tú misma». O, «Sí, la verdad es que eres un poco aburrida y estaba empezando a plantearme cobrarte por esto. Pero no te preocupes, no eres tan patética. Yo creo que con un poco de dinero se te puede aguantar perfectamente».

—«¿Sabes? Quizás es algo cruel decirlo, pero una de cada tres personas es fea. Mira a tu izquierda; mira a tu derecha. Si no son ellos…».

—Cuando te dice: «Que tengas un buen día», la miras seriamente, dejas una pausa para crear Tensión Sexual y respondes: «No me digas lo que tengo que hacer». Nueva pausa. «Ni siquiera te conozco y ya estás en plan dominante».

—Métete en conversaciones que no van contigo pero puedes oír claramente con comentarios divertidos de desaprobación.

—Acúsala, sospecha de ella, acúsala. Por ejemplo, con mucha seriedad: «Oye, no me estarás siguiendo (o espiando, o escuchando, o lo que pueda venir al caso)». Pausa. Mirada suspicaz. «Ajá, entiendo» Y continúas, como realmente sospechando mucho de ella: «Y dime, ¿por qué actúas con tanto nerviosismo cuando saco el tema?».

—Explícale a menudo por qué lo tiene crudo contigo o cómo tendría más posibilidades si hiciese tal o cual cosa. Una de sus respuestas más típicas es: «Gracias, pero no te he pedido tu opinión», ante lo cual tu puedes replicar con algo como: «Haces bien», dejando sobreentendido con el tono que hace bien porque no le gustaría oírla. A veces, puede que la respuesta sea más agresiva, del tipo: «Gracias, pero no te he pedido tu opinión. Cuando la quiera, ya te la pediré así que, ¿por qué no te callas entre tanto?», y en estos casos puedes rematar la faena con comentarios del tipo: «Disculpa», pero solo para seguir con un ataque a traición: «entiendo que alguien en tu situación esté especialmente susceptible».

—Si te pregunta por cómo le queda la ropa, puedes responder: «Sí, esos pantalones te hacen el culo gordo… Bueno, la verdad es que no sé si son los pantalones».

—En la misma línea, podría preguntarte en tono confidencial: «Oye, sinceramente, ¿tú crees que estoy gorda?» Responde: «No sé. A ver, ¿cuánto pesarás? ¿Unos cien kilitos, kilo arriba, kilo abajo?».

—O también: «De verdad, no sé qué le pasa a mi pelo. Hoy lo tengo horrible», a lo que contestarás: «No te lo quería decir. La verdad es que es horrible por lo general, pero lo de hoy creo que ya se pasa de la raya. Oye, ¿te importa si andamos por aceras separadas? Solo por hoy, ¿sabes?» O también: «No te lo quería decir, pero lo has acabado descubriendo. La verdad es que me da un poco de vergüenza que me vean contigo por la calle».

—Supón que sale con un test, del tipo: «Odio esa música que pones en el coche». Una respuesta chulifresca sería decir en tono juguetón pero seguro: «¿En serio? Pues entonces no va a gustarte nada estar en mi coche, porque ahora que sé que te molesta es lo único que voy a poner».

—«He ido al gimnasio hoy» Respuesta: «Perfecto. Lo necesitas».

—Cuando te saque algún defecto, haces muestra de humildad confesándole otro de tus defectos (con lo cual sus Defensas desaparecen por completo), para frotarte las manos a continuación y comentar con cierto entusiasmo: «Ahora es mi turno».

—Implica a terceras personas, especialmente completos extraños, pidiendo su opinión y poniéndola en evidencia ante ellos, acusándola o lamentando alguno de sus comportamientos casi con incredulidad. Recuerda no implicar a ningún Aven que te la pueda levantar.

—Solo con quien tengas verdadera confianza, en un tono claramente amistoso y de broma: «Tu necesidad de atención y aprobación es casi tan triste y lamentable como tu apariencia física». Cultiva otro tipo de frases rimbombantes y cariñosamente ofensivas.

—Ante cualquier acusación o defecto tuyo que señale: «No estamos hablando de mi, estamos hablando de ti».

—Digamos que se pone a criticar a otra chica: «Oye, esa chica de allí es horrible, ¿no te parece?» Llévate la mano a la boca, y exclama: «Vaya. El caso es que la había confundido contigo poco antes».

—Cuando se muestre impertinente de un modo juguetón. «Nos pelearíamos todo el tiempo» (larga pausa) «Y yo ganaría siempre».

—«Te amo», con sarcasmo, especialmente después de que haya hecho algo reprobable.

EL JUEGO DEL ROMANCE: RASGOS Y COMPORTAMIENTOS QUE GENERAN 4CP

Tras haber demostrado suficiente valor al Objetivo y una vez este lo ha corroborado con sus IDIs debemos, sin abandonar el Juego del Valor, iniciar otro paralelo: el Juego del Romance.

Aunque, de nuevo, el Juego del Romance y sus elementos sean aplicables en numerosas situaciones, nos centraremos sobre todo en él tras haber concluido la Campaña de Valor y al iniciar la Campaña de Romance. Esto suele hacerse cuando hemos recibido IDIs del Objetivo y este se ha calificado de algún modo ante nosotros.

Los ingredientes básicos de este juego son el Confort, la Confianza, la Conexión, la Caballerosidad y la Predestinación, elementos que vienen expresados por la fórmula 4CP
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. A veces también nos referiremos a esta fórmula utilizando, simplemente, la palabra Romance
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.

En otras palabras, tu misión en el Juego del Romance, no va a ser otra que la de:

Generar
Confort
entre el Objetivo y tú, logrando que este se sienta a gusto en tu compañía.

Hacer que ella sienta
Confianza
hacia ti, pues de lo contrario su Radar se encontrará demasiado activo y, en el mejor de los casos, no podrás avanzar.

Crear una poderosa
Conexión Emocional
especial entre ambos, la cual la sacará de su Modo Lógico y permitirá que te perciba como la persona indicada para tener sexo con ella. Este es uno de los aspectos más importantes del Romance.

Comportarte con
Caballerosidad
. Es decir, dejar entrever en los pequeños detalles una clara dedicación y espíritu protector por tu parte, similares a los que ofrecería un pintoresco caballero medieval.

Insinuar una cierta magia y
Predestinación
en vuestra relación. Esto hará que el Objetivo la valore mucho más y la sitúe en un lugar aparte, alejada en su mente de otras experiencias ordinarias.

Dicho esto, paso a ofrecerte diez cualidades que podrán ayudarte enormemente en el Juego del Romance, así como los principales aspectos de cada una de ellas.

FOCOS A ELLA

Tengo un amigo al que le encanta frecuentar lugares de ambiente, especialmente aquellos donde acuden las mujeres lesbianas. Estas le fascinan porque, según él, son muy capaces de seducir a mujeres que están totalmente convencidas de ser heterosexuales.

En otras palabras, son capaces de hacerlas ir en contra de todo lo que creen o han aprendido.

Otra cosa que mi amigo me dice es que su secreto se basa, fundamentalmente, en un principio: muchas de estas mujeres tienen la capacidad de interesarse genuinamente por la mujer a la que seducen de una forma que esta no ha experimentado jamás.

Sugerente, ¿no?

Pues bien, he aquí otro principio básico que comparten todos los grandes Aven:

Siempre que seas un buen observador, ella te dará toda la información y claves que necesitas para pasar de Nivel.

Por ello, no dispares a ciegas si puedes evitarlo.

Ahora bien, ¿quiere decir esto que debes dejarle claro que estás por completo pendiente de ella?

En absoluto.

De hecho, resulta importantísimo que esta atención no se dé de forma explícita. Aunque no se te escape nada en ella que pueda ofrecerte alguna clase de valiosa información, ella solo puede percibirlo a través de pequeños detalles en tu forma de comportarte y comunicarte.

Será necesario que la observes de una forma relajada y natural. Nada que indique concentración o sobreesfuerzo, pues esto le haría sentir que lo intentas demasiado y se convertiría en una DEV. De nuevo, no te vuelques.

Y no trates de entenderla a un nivel profundo. Más que prestar atención a todo lo que dice o hace, te aconsejo que desarrolles un talento para detectar aquellos elementos clave de la persona que tienes en frente. Aquellos relevantes para pasar de Nivel.

Me refiero a sus Estados Favorables. Y, dentro de estos, a todo lo que tenga que ver con IDIs, cambios fisiológicos y ciertas palabras de las que se sirve de un modo y con un énfasis particular
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. Presta también atención a su nivel de entusiasmo, al grado de respeto que te muestra y sus respuestas o reacciones frente a lo que haces. Estudia todo aquello que, en general, tenga que ver con su comunicación no verbal.

Además, es importante que no permitas que tu ego interfiera en el análisis. Es normal que si este no revela lo que deseas, tiendas a sentirte mal por ello. Pero recuerda que, de nuevo, este es otro rasgo Beta, otra DEV.

No olvides que solo se trata de un nuevo juego que estás aprendiendo a jugar y que no tiene nada que ver contigo. Así que olvídate un poco de tus propios miedos o estados a la hora de calibrar. Y nunca te sientas mal por los diagnósticos que tu Calibraje te ofrezca. Si dejas que te afecten, puede que tus emociones negativas tomen el mando y empieces a ofrecer respuestas automáticas y pobres.

Por el contrario, estas deben ser deliberadas y ajustarse a las necesidades de la interacción
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. Al menos hasta que te hayas interiorizado el buen juego y puedas ser bueno de forma automática.

Lo dicho: tu ego debe quedarse al margen del juego. Guárdatelo para estudiar, revisar o mejorar aspectos de tu vida y tu persona. Allí te resultará mucho más útil.

Si dejas tu ego a un lado, también ella dejará de percibir la interacción como una Batalla de Egos
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. Así, será mucho más fácil que abandone el Modo Lógico y se relajen sus Defensas. Cosas ambas necesarias para poder establecer con el Objetivo una poderosa Conexión Emocional, que rara vez habrá sentido antes.

Con dicha Conexión, nos será muy fácil llevarla a un Estado Favorable y, de ahí, pasar de Nivel.

Nos abrirá la posibilidad de actuar como esos boxeadores que, aun cuando parecen tranquilos y hasta despreocupados a lo largo del combate, sorprenden lanzando oleadas demoledoras de golpes en los momentos clave. Así, provocan que toda la acción tenga lugar justo en los instantes en que se ha abierto una brecha en la guardia del rival o este ha mostrado algún tipo de debilidad.

Otro beneficio de alcanzar dicha objetividad es el de escapar a ese error, en el que tantos Fruscos incurren, de proyectar tus propios sentimientos y deseos sobre el Objetivo. Evitamos así caer en la trampa del Frusquiluso
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, que suele distorsionar la realidad y mitificar a la mujer que tiene en frente.

Esto solo te ahorrará una enorme cantidad de yerros en tus juicios y decisiones.

A continuación te ofreceré algunos consejos que te permitan llevar a la práctica este fabuloso principio con mayor éxito.

JÚZGALA POR SUS ACCIONES, NUNCA POR SUS PALABRAS

¿Te ha pasado alguna vez que una mujer te desconcierte o descoloque? ¿Muchas?

Sí, ya sabes a lo que me refiero. Esa especie de: ¿pero no decía que…? ¿Cómo es que ahora?

Todos hemos estado ahí. La verdad es que las mujeres mienten. Y, a diferencia de los hombres, que con mayor frecuencia mienten a los demás, ellas se mienten a menudo a sí mismas. De modo que la cosa se complica bastante.

Por si esto fuera poco, las mujeres en general son más sutiles que los hombres, no les gusta decir las cosas directamente
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y tienen una especie de lenguaje propio.

Otro factor que juega en el mismo sentido es su elevada conciencia social y de lo que es considerado correcto o incorrecto, así como una mayor necesidad de aceptación que el hombre, cosa que lleva a las mujeres a ser mucho más miradas a la hora de hablar. De ahí que rara vez dirán algo que, por sincero, pudiese causar desaprobación social, comentarios negativos por parte de su familia o amigas, etc.

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