—Ya —contestó Tupra, o ‘
I see',
fue lo que dijo—. Pero te contaré también de un poco antes.
Arrancó, dio la vuelta a la plaza para salir de ella en dirección al norte. No sabía dónde vivía, pensé: 'Quizá en Hampstead'. Volví a mirar hacia mis luces con la cabeza vuelta, también hacia las del bailarín confiado. Tupra miró de reojo mis dos miradas. Seguía todo encendido, los ventanales danzantes, mi silenciosa ventana. La mía tenía que seguirlo por fuerza, y así seguiría hasta que yo volviera, con Tupra nunca se sabía a qué hora se regresaba. Y por mucho que él se empeñara, por suerte, no había nadie en la casa, esperándome, que pudiera apagar nada en mi ausencia, mientras yo no estaba. Nadie tenía mis llaves, y allí nunca me esperaba nadie.
Julio de 2004
(Fin del Segundo Volumen de
Tu rostro mañana)
JAVIER MARÍAS FRANCO, nace el 20 de septiembre de 1951 en Madrid, en el antiguo número 16 de la calle Covarrubias, del barrio de Chamberí. Es el cuarto hijo de los cinco varones que tuvo el matrimonio formado por Dolores Franco Manera, profesora, y Julián Marías Aguilera, filósofo. No conoce a sus abuelos paternos, ni a su hermano mayor Julianín que había fallecido en 1949, a la edad de tres años.
Sus recuerdos de la niñez están unidos a la nieve en América, y a los tranvías y carros en Madrid. Cuando tiene siete años, a comienzos de 1959, dejan el pequeño piso de Covarrubias y se cambian al definitivo de la calle Vallehermoso, un piso lleno de luz, libros y cuadros. Su niñez transcurre jugando con sus hermanos, y yendo al cine con su madre, su abuela o las criadas.
Recibe una sólida educación liberal en el Colegio Estudio, heredero de la Institución Libre de Enseñanza, y en su casa, donde sus padres daban clases a estudiantes extranjeros y recibían a intelectuales. Aquí conoce a Rosa Chacel, con la que se carteará hasta el fallecimiento de ésta. Lee a Richmal Crompton (Guillermo Brown), Enid Blyton, Dumas, Salgari, Corbert, Paul Féval, Verne y los tebeos de Tintín. A los once años empieza a escribir para "seguir leyendo lo que le gusta", según él mismo ha contado. Pasa los veranos con su familia en Soria. Durante uno de ellos, en casa de Heliodoro Carpintero y sus hermanas Mercedes y Carmen, escribe con quince años su primera novela, La víspera, que nunca ha llegado a publicar.
El 19 de abril de 1968 el diario El Noticiero Universal, de Barcelona, publica su cuento La vida y la muerte de Marcelino Iturriaga, que había escrito con quince años.
En octubre entra en la Universidad. Se matricula en la carrera de Filosofía y Letras, de la Universidad Complutense de Madrid, entre sus compañeros está el futuro director de cine Agustín Díaz Yanes, que pertenece como él al Comité de Acción Revolucionaria (dependiente del Partido Comunista Internacional). Hay que señalar que su afiliación política durará poco tiempo y que en los años siguientes se caracterizará por su independencia política, haciendo gala de no pertenecer a ningún partido.
Ha sido profesor en Oxford y en la Universidad Complutense de Madri