JO
: ¿Mamá…? Hola, soy yo… Estamos bien… En Seward… Sí, sólo está a treinta kilómetros, pero… ¿estás segura de que no te causará demasiados problemas…? Una cena sería estupendo, mamá. A los muchachos les encantaría. Sí, Bill también está aquí. Vale… Está bien… No lo sé, es algo complicado. Está…, bueno viene en compañía de alguien… No, creo que vamos a tener a que llevarla con nosotros. Está bien. Te veré pronto.
Cuelga. Se dirige hacia el coche, donde sus hombres están comprobando si el escáner funciona todavía.
JO
: ¡Bueno muchachos, tenemos filete esta noche!
RICK
: ¡Estupendo! ¡Verdadera comida!
(En voz baja.)
¿Crees que es una buena idea?
JO
: Creo que es una idea estupenda.
Jo mira a Melissa y añade:
JO
: Y ahora ¿quién va a alquilar un coche?
Todos los del equipo se apartan de ella al unísono.
EQUIPO
: Vamos, Jo…
JO
: ¿Quién no lo ha hecho todavía?
(Elige a uno.)
¿Larry? Venga, Larry, tú puedes hacerlo.
Interior agencia alquiler coches. Tarde
Un dependiente, de aspecto severo, rellena los formularios.
EMPLEADO
: ¿Durante cuánto tiempo querrá tener el coche?
LARRY
(muy tenso)
: Pues… un día.
EMPLEADO
: ¿Desea nuestro seguro a todo riesgo que cubre cualquier tipo de colisión y daños?
LARRY
: Sí.
EMPLEADO
: Es la póliza de doscientos cincuenta dólares… Puedo ofrecerle, si lo desea…
LARRY
: Quiero la mejor cobertura. Sí, a todo riesgo.
Exterior agencia de alquiler de coches. Tarde
Jo se sienta tras el volante de la nueva furgoneta y arranca haciendo chirriar las ruedas y levantando una nube de polvo. Vemos cómo se aleja por la carretera. Las nubes de tormenta retumban y producen un ruido sordo.
Interior laboratorio del centro de tormentas fuertes. Tarde
Bajo luces fluorescentes se desarrolla una gran actividad; algunos van apresuradamente de un lado a otro, otros se hallan frente a monitores, observando las imágenes algo confusas del frente tormentoso, que abarca vanos estados del Medio Oeste. Un científico habla por teléfono.
PRIMER CIENTÍFICO
: Tenemos puestos de observación en tres estados, desde Texas a Kansas, la máxima de la corriente sigue estando por encima de los trescientos milibares, y se espera más actividad de tornados en los tres sectores… Las condiciones seguirán siendo muy peligrosas durante la noche…
SEGUNDO CIENTÍFICO
: Jonas para ti, por la dos…
PRIMER CIENTÍFICO
(aprieta un botón)
: Sí, Jonas. ¿Dónde estás?
Mientras escucha, mueve el cursor sobre el enorme frente nuboso. Aprieta el ratón cerca del centro de la nube. En la pantalla aparece una pequeña etiqueta luminosa: «
JONAS MILLER
.»
Teclea y los colores de la tormenta cambian a rojos, azules y verdes.
PRIMER CIENTÍFICO
: Estoy observando el radar. Por el momento no detecto ningún TVC, pero parece que las condiciones se están desarrollando en tu zona… Sí… Ve con cuidado por ahí, Jonas.
Plano amplio de la cafetería de camioneros.
Noche
Entre una nube de polvo, llegan Jonas y su equipo, que aparcan las camionetas en formación, una junto a otra. Jonas baja de una de ellas con aspecto preocupado.
JONAS
: ¿Te encuentras bien, Jo?
JO
: Sí. No pasó nada. El tornado dejó caer un par de hermanos gemelos y se desmembró.
JONAS
(
asintiendo con un gesto)
: El núcleo aparecía débil en el Doppler, por eso no nos lanzamos a cazarlo.
JO
: Bueno, tendremos que intentarlo de nuevo.
JONAS
: Me alegro de que estés bien.
Por su tono de voz parece decirle: «Fuiste una estúpida al intentar cazar ese tornado.» Jo no dice nada. Jonas estudia el cielo.
JONAS
: Bueno… parece que tendremos más antes de que termine el día. Los de la NSSL han detectado mesociclones al norte, cerca de la frontera de Kansas, y también al sur. Resulta difícil saber qué dirección tomar.
JO
: Bien, y entonces ¿qué piensas hacer, Jonas?
JONAS
(sonriendo)
: Voy a tomar una taza de café y a considerar los datos.
(Se vuelve hacia uno de los miembros de su equipo.)
Vigila los coches, Eddie.
Sin dejar de sonreír, Jonas entra en la cafetería, junto con el resto de sus hombres.
JO
: Ese hijo de puta quiere ver qué va a hacer Bill.
Junto a los vehículos. Bill
De pie, al lado de Dusty, Bill mira el cielo, con las manos en los bolsillos. Da una patada al suelo terroso y observa la dirección que toma el polvo, arrastrado por el viento. Vuelve a levantar la mirada.
Interior de la cafetería
Jonas y los miembros de su equipo se sientan a una mesa apartada. Abren los ordenadores portátiles y empiezan a teclear. Parece una convención de la IBM. Luego miran hacia fuera.
Jo y Timmy de regreso
Ella mira a Jonas y a sus muchachos, sentados en el reservado y vigilando a Bill, que sigue fuera.
JO
: Menuda bandada de buitres.
Coge un chicle de un paquete y le ofrece otro a Timmy, que niega con la cabeza.
TIMMY
: ¿De veras crees que Jonas se limita a esperar para ver qué hacemos nosotros?
JO
: Ninguna ley le impide hacerlo.
Jo se mete el segundo chicle en la boca. Timmy la mira desconcertado, mientras ella desenvuelve otro. Ahora tiene la boca llena.
JO
: ¿Quieres disculparme?
Jo pasa junto a Melissa, que está de pie, a un lado, hablando por el teléfono portátil.
MELISSA
: S
Í
, comprendo que es un problema… Bueno, todos tenemos días malos.
Junto a las camionetas de Jonas. Tarde
Jo sale de la cafetería, masticando chicle. Eddie, un joven universitario de rostro bronceado, está apoyado contra una furgoneta, contemplando la gran tormenta que se avecina.
JO
: Hola, Eddie.
EDDIE
: Hola.
JO
: Es una condenada nube…
EDDIE
: Sí…
(Jo se acerca más a él.)
¿Qué estás haciendo aquí?
Ella se apoya contra la camioneta, por el lado del conductor, junto a Eddie.
JO
: Sólo quería echar un vistazo a vuestro nuevo escáner.
EDDIE
: Sabes que no puedo enseñártelo. Jonas me mataría.
JO
: Sí, lo haría. ¿Te apetece un chicle?
EDDIE
: Claro.
Mientras él desenvuelve el chicle, Jo mira el cielo y observa la cabeza de la tormenta.
JO
: Creo que se nos echa encima una fuerte. Es posible que la línea seca se esté ampliando.
EDDIE
: S
Í
, parece que habrá más corriente aérea ascendente.
JO
: Pero todavía no se distingue la cola de castor.
EDDIE
(señalando)
: Creo que está formándose una por allí.
JO
: ¿Dónde?
Mientras hablan, Jo desliza la mano al interior por la ventanilla abierta del conductor.
EDDIE
(señalando)
: Allí. ¿No la ves a lo largo de aquella línea? Ya han aparecido las primeras estrías…
JO
: Sí, tienes razón. Eso podría ser una cola de castor en formación.
EDDIE
: Sí, claro que sí…
JO
: En tal caso, esa nube podría dejar caer un tornado en cualquier momento.
EDDIE
: No lo creo.
JO
: ¿Por qué no?
EDDIE
: Porque tú estás aquí demasiado tranquila.
JO
(le da un ligero golpe en el hombro)
: No será por mucho tiempo, Eddie
(se aleja).
Si alguna vez quieres un trabajo decente, ven a verme.
Jo se dirige hacia la zona de aparcamiento, donde están Bill y Dusty.
Bill y Dusty. Tarde
De espaldas a nosotros, observan atentamente la gigantesca cabeza de la tormenta a unos ocho kilómetros de altura; es un magnífico atardecer. Sus figuras quedan empequeñecidas ante la enorme formación nubosa.
BILL
: El viento amaina.
DUSTY
: Sí.
Surge un rayo de la base de la nube y a continuación se produce un fuerte restallido.
Interior de la cafetería. Tarde
Plano cercano de una pantalla de ordenador en la que se muestran varias ventanas abiertas: radar Doppler coloreado, diagramas de contornos en milibares, campos de velocidad, etc.; datos de la tormenta que se avecina.
JONAS
: Se están produciendo ráfagas rápidas que se separan de la corriente ascendente principal. Ahí está la curva de trescientos milibares, donde la verticidad de bajo nivel no excede de cero coma dos.
Plano amplio. Se ve a Jonas y a los miembros de su equipo ignorando el aspecto del cielo, mientras se hallan concentrados en las pantallas de ordenador, rodeados de tazas de café, módems y faxes celulares.
JONAS
: El mesociclón nunca se desarrollará a tan baja altura, pero… ¿tenemos datos de la zona superior?
(Los ayudantes revisan unos papeles.)
Necesito más información de lo que está sucediendo a niveles más altos…
Exterior. Por encima de la nube tormentosa.
Tarde
La cabeza de la tormenta avanza, cortada horizontalmente por otra nube. Resuenan los truenos. Descenso de la imagen desde la nube gigantesca hasta Bill y Dusty, que se hallan de espaldas a nosotros, observando el cielo. La nube aparece teñida de verde y púrpura.
BILL
: Está adquiriendo una tonalidad verde.
DUSTY
: Sí.
Bill extiende una mano y Dusty deja caer en ella las llaves del vehículo. Ninguno de los dos ha dejado de mirar el cielo.
En el interior de la cafetería
Jonas y sus hombres continúan con las narices pegadas a las pantallas.
JONAS
; No creo que aparezca un nuevo tornado sin un mecanismo capaz de generar rotación de bajo nivel, porque…
UN AYUDANTE
: ¡Jonas, mira!
Todos miran por la ventana: Jo y los miembros de su equipo están subiendo a sus vehículos, dispuestos a abandonar la zona de aparcamiento. Melissa todavía habla por el teléfono portátil. Dusty la coge del brazo y la empuja dentro de un coche.
El reservado de la cafetería ha quedado vacío en un santiamén. Jonas y los suyos tropiezan entre sí mientras se precipitan hacia el exterior.
Exterior de la cafetería. Tarde
Jonas sale de la cafetería con sus hombres. Se está poniendo el sol, y el cielo ha adquirido un tono rosado que contrasta con la amenazadora nube verde y púrpura. Cuando llegan al aparcamiento, los vehículos dejo y su equipo se distinguen a lo lejos.
JONAS
: ¡Vamos!
Sus hombres corren a los vehículos. Jonas ocupa el asiento del pasajero de la camioneta que conduce Eddie.
Interior de la furgoneta
Jonas mira fijamente la carretera, para no perder de vista los vehículos que se alejan. Eddie se dispone a poner en marcha el motor.
JONAS
: ¡Vamos, Eddie, muévete!
EDDIE
: ¡Qué demonios…!
El joven se inclina por debajo del volante. Una gran masa de chicle cubre la llave de contacto, que está puesta.
EDDIE
: ¿Dónde está la llave?
JONAS
: ¡Nitrógeno! ¡Nitrógeno! ¡Necesito llaves de repuesto para la camioneta uno! ¡Ahora mismo!
(Fulminando a Eddie con la mirada.)
Estuviste hablando con ella. ¿Cuántas veces te he dicho…?
Desde el asiento de atrás le tienden un pulverizador. Jonas rocía la cerradura del encendido y se forma espuma alrededor del chicle.
JONAS
: No se puede confiar en Jo.
La masa de goma congelada se desprende en bloque, y deja libre la cerradura. Al mismo tiempo una furgoneta se detiene al lado. Jonas abre la puerta y toma las llaves de repuesto, que entrega a Eddie.
JONAS
: ¡Vamos!
Vista amplia de la zona de aparcamiento
Jonas y sus hombres se alejan levantando tras de sí nubes de polvo.
Interior de la furgoneta de Jonas
La carretera se extiende desierta, y se lanzan por ella a toda velocidad.
JONAS
: Conecta el radar. Trataremos de encontrarlos.
VOZ DE TÉCNICO
(por el intercomunicado)
: Ya los tenemos, Jonas.
Eddie aprieta un botón en el tablero de mandos.
MELISSA
(por la radio)
: ¿Lo han intentado ya catorce veces?
EDDIE
: Tiene que ser alguna clase de código…
MELISSA
(por la radio)
: Claro, tiene los pezones demasiado sensibles… ¿Han practicado el sexo cada día?
Jonas frunce el entrecejo mientras escucha.
MELISSA
(por la radio)
: Recuerde que después debe tumbarse de espaldas durante quince minutos. No, no, nada de sexo oral. Eso sería una pérdida de tiempo…
JONAS
: Apaga eso.
EDDIE
: Pero…
JONAS
: ¡Apágalo!
Eddie obedece. Jonas mira por la ventanilla.
EDDIE
(resentido)
: Quizá se trate de una información importante. Podríamos…
JONAS
(
sin dejar de mirar por la ventanilla)
: Abandonarán en cuanto se les eche la noche encima. Ya no tienen la suficiente luz.
(Acciona un botón del panel de mandos)
Pero nosotros podemos seguir trabajando a pesar de la oscuridad, ¿Verdad, muchachos?