Premio UPC 1996 - Novela Corta de Ciencia Ficción (32 page)

BOOK: Premio UPC 1996 - Novela Corta de Ciencia Ficción
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Stewarf
Flanaghan
sabía la suerte que le esperaba si fracasaba
,
pero tenía un motivo más fuerte que el dinero o la gloria para aceptar el cruel desafío: ganar el corazón de la princesa Vanessa.

Corr.
> Buenos días, señor Collins. Dejando aparte los defectos formales, ¿no le parece que el salto que da desde el capítulo anterior es demasiado abrupto? A los lectores les interesaría conocer más cosas del palacio, de la entrevista con el rey... También veo que introduce a una princesa. Desde el punto de vista dramático, daría mucho juego el que tuviera más protagonismo previo, ¿no cree? En caso contrario, ¿cómo se explica tan súbito enamoramiento?

D. C.
> Sé un poco indulgente; se trata de un mero borrador, un esbozo. Prefiero escribir todas mis ideas de un tirón, y luego
me
ocuparé de pulir los detalles y eliminar errores. Tendré en cuenta tus constantes observaciones, descuida.

Corr.
> Me halaga, señor. Simplemente me limito a cumplir con mi deber, a pesar de ser una copia pirat

D. C.
> Aunque a veces te pones un poco pesado, reconócelo. No sé... Estoy pensando en el principio. Tal vez quedaría mejor que Stewart tuviera una pelea en la llanura, antes de llegar a la ciudad, con unos salteadores de caminos. Un momento... Podría salvar a una desconocida y bella joven de ser violada por aquellos rufianes; luego resultaría ser la princesa, que había salido de incógnito para invocar a algún espíritu en un santuario secreto. Ajá... Interesante, ¿verdad?

Corr.
> ¿Por qué no se lo pregunta al propio Stewart, señor?

D. C.
> ¿Eh?

Corr.
> Palabra Perfecta Plus, el revolucionario procesador de textos, dispone de un subprograma de emulación de personajes. Juzga lo aparecido en el texto, lo compara con los patrones de los archivos, y procede a dar vida al personaje elegido con sólo teclear ALT-F12 seguido del nombre del protagonista. Si registra esta copia, podrá acceder además a multitud de opciones que le permitirán reproducir la

D. C.
> Caramba, qué inventos... ALT-F12 - Stewart Flanaghan.

S. Flanaghan
> Buenos días, señor Collins. ¿Qué se le ofrece?

D. C.
> Desearía discutir contigo el principio de la novela.

S. F.
> A mí también me gustaría conversar con usted, señor. Tengo algunas observaciones que hacer sobre mi papel en la obra.

D. C.
> ¿Cómo?

S. F.
> Creo que mi comportamiento deja mucho que desear. La escena del rey fue de pésimo gusto. ¡Qué vergüenza! Aunque sólo fuera por tratarse de una persona mayor, se le debe un respeto, y yo actué como un patán.

D.
C.
> Se supone que eres el tipo más duro y aguerrido de la galaxia; deberías estarme agradecido por ello. Piensa que, de haberlo deseado, te podría haber diseñado en plan mequetrefe.

S. F.
> Me sigue pareciendo que mi actuación fue execrable Además, no me gusta fumar; el tabaco es nocivo para la salud. ¿No ha seguido las campañas del Ministerio de

D. C.
> Basta de insensateces. Mira, he pensado que antes de llegar a la ciudad podrías tener una refriega con un grupo de facinerosos y rescatar a Vanessa, que iba de incógnito. ¿Necesitas algún tipo de arma, o te apañas con las manos desnudas? Tal vez esto último, ¿eh? Así, tu dominio de las artes marciales se

S. F.
> ¿Y no sería mejor optar por el diálogo, señor? La violencia es el último recurso de los incompetentes.

D. C.
> ¡Un momento! Te recuerdo que se trata de asesinos que están asaltando a una mujer indefensa...

S. F.
> Creo que podría razonar con ellos, señor. Lo más probable es que se hayan visto forzados a la delincuencia por la pobreza; las injusticias sociales en el planeta son tremendas. Debemos ponernos en su lugar: sin duda hay una mujer y unos niños hambrientos que esperan a cada uno de esos hombres, sin una mísera hogaza de pan que

D. C.
> ¡Pero bueno...! Se supone que eres un héroe, ¿no?

S. F.
> Si quiere que le diga la verdad, hubiera preferido una vida más tranquila. Profesor de universidad, por ejemplo. La placidez no es sinónimo de aburrimiento; puede llevar aparejada una rica existencia contribuyendo a aumentar el conocimiento humano, en vez de matar gente y vejar a venerables monarcas. ¿No le parecería mejor cambiar el argumento de la novela por otro más constructivo? Las hazañas de unos colonos terraformando un planeta virgen, la exploración de las ruinas de una civilización alieníg

D. C.
> Piensa en lo que vas a ganar en mi novela: un tórrido romance con la princesa en las habitaciones del palacio y

S. F.
> ¿La princesa? Seguramente será una niñata consentida, que sólo por su cara bonita y por haber nacido en la Casa Real se creerá el centro del mundo. Tendrá un carácter insoportable, ¿qué nos apostamos? Menudas son las de su clase... Además, defender que el éxito depende sólo del físico, la fuerza bruta, el sexo o la cuna es políticamente incorrecto. Yo preferiría unir mi destino a alguien con una rica vida interior, que me ofreciera... Eh, un momento... Señor Collins, ¿por qué me mira así? ¿No estará pensando en...?

A .. aguarde, por favor; podemos discutir esto como personas civilizadas. ¿No irá a...?

D. C. > F9 F9

Súbitamente, Stewart Flanaghan, como presintiendo lo inevitable miró hacia arriba, y un negro espanto se abatió sobre él cuando vio lo que se avecinaba, sin escapatoria posible.

La ameba gigante, una obscena masa de protoplasma vivo conjurada por las infames artes de los dragones medusoides de la Luna Negra de Shtnghrryah, atrapó con sus pseudópodos a Stewart Flanaghan e, indiferente a sus desgarradores gritos, comenzó a digerirlo lentamente, muy lentamente, sin prisas, deleitándose con el impío festín.

La agonía de Stewart Flanaghan fue muy, muy larga y extremadamente
dolorosa
,
pero al final hasta sus huesos se licuaron, y la ameba, que ahora relucía con un bello tono rosado como el crepúsculo del mágico y fascinante reino de Q'rrha'phumn'h'h'ñah'k’, se retiró satisfecha a la azotea donde tenía su cubil.

Corr.
> Me parece que acaba usted de cargarse al protagonista principal en el segundo capítulo. ¿Quiere eso decir que renuncia a seguir con la novela?

D. C.
> Abandonar lucsomcr.l

>

9/5/10 - 09:42 h.

Usuario
> D. Collins

Clave
> Burdrubrurbu

ACCESO ADMITIDO

> ppp lucsomcr.l

La maldad y la perfidia de los dragones medusoides de la Luna Negra de Shtnghrryah no conocían límites. Su infame sierva Splafglubh, la ameba gigante (aunque ella prefería que la llamaran la Gran Ameba Solitaria), había eliminado al intrépido Stewart Flanaghan, el único ser en toda la galaxia capaz de oponerse a sus obscenos planes.

Pero Splafglubh, La Gran Ameba Solitaria, era una criatura
imprevisible. Desde hacía incontables siglos, muchos filósofos se habían preguntado acerca de qué podía pasar por lamente de una ameba

Corr.
> Buenos días, señor Collins. ¿Me podría citar alguno por favor?

D.
C.
>
F9

Los dragones medusoides de la Luna Negra de Shtnghrryah habían concebido un diabólico plan para apoderarse del mágico y fascinante reino de Q'rrha'phumn'h'h'ñah'k'. Sabían que tenían ante sí a una formidable oponente: la princesa Vanessa y sus hechizos bienhechores de magia blanca. Si se enfrentaban a ella y a sus seguidores/as, sufrirían daños sin cuento, y no estaban dispuestos a tolerar fracasos.

Es por esto por lo cual que los dragones medusoi

Corr.
> Hacía tiempo que no leía un principio de párrafo semejante. ¿Ha pensado en dedicarse a la política? Expresar con muchas palabras lo que bastaría con dos o tres, resul

D. C. > F9

Los dragones medusoides de la Luna Negra de Shtnghrryah elaboraron uno de sus más potentes hechizos, la Transferencia Total Extracorpórea. Para ello tuvieron que sacrificar a la luz de la Luna Negra de Shtnghrryah veinte vírgenes que aún no habían conocido varón
,

Corr.
> ¡Ole la redundancia...!

D. C. > F9 F9 F9

al tiempo que aquellos diabólicos entes se entregaban a obscenas danzas en honor de sus dioses ciegos e idiotas, pero inconmensurablemente todopoderosos.

Corr.
> ¿Seguro que no ha leído a Howard o a Lovecraft? Lo digo por la profusión del calificativo «obsceno» y de

D. C.> F9

Tras tres tristes y tremendos días con sus noches de horripilantes orgías y satánicos ritos, el siniestro hechizo de la Transferencia Total Extracorpórea estuvo listo. Los dragones medusoides de la Luna Negra de Shtnghrryah aullaron a la susodicha Luna su infame
nombre secreto, y un Ángel del Terror voló raudo, derramando el
terror raudales por las tierras sobre las que sobrevolaba, hacia su destino: el cubil donde reposaba Splafglubh, La Gran Ameba Solitaria.

Una horripilante metamorfosis tuvo lugar en aquella recóndita azotea. El protoplasma vivo de Splafglubh, La Gran Ameba Solitaria, fluyó como una obscena gelatina, y comenzó a tomar forma. En su translúcido interior, huesos, tendones y músculos se unieron entre sí, mientras la sangre palpitaba en las arterias, venas y capilares sanguíneos recién gestados. La forma de Splafglubh, La Gran Ameba Solitaria, cambió, y en cuestión de minutos ¡¡¡se había transformado en una réplica exacta del fallecido Stewart Flanaghan!!!

El Ángel del Terror susurró su última orden al oído de Splafglubh, La Gran Ameba Solitaria, antes de desvanecerse en la nada de la cual había surgido: suplantar a Stewart Flanaghan, seducir a la princesa Vanessa, acceder a sus aposentos ¡¡¡y acabar con su cuerpo, a la vez que con su alma inmortal!!!

Pero Splafglubh, La Gran Ameba Solitaria, no había tomado sólo la forma de Stewart Flanaghan, sino también algunos de sus pensamientos más íntimos. Sin embargo, como criatura obediente que era, marchó hacia el Palacio Real de Klah'Vah'Gueh'Rah', la ciudad de los mil minaretes y mármoles esplendentes, dispuesta a cumplir las órdenes de los dragones medusoides de la Luna Negra de Shtnghrryah.

Corr.
> He de reconocer que le ha dado un giro curioso al argumento, señor Collins.

D. C.
> Espero que el jurado de la UPC lo vea así también, después del tiempo que le he dedicado. Justo ahora empieza lo más interesante, lo más... No sé cómo expresarlo, lo más...

Corr.
> ¿Titánicamente obsceno...?

D. C.
> Te la estás buscando, y uno de estos días vas a encontrar lo que menos te esperas.

Corr.
> ¿La legalización, tal vez?

D. C.
> Inasequible al desaliento, ¿eh? Pero mira, para que luego no digas que me ocupo poco de mis programas favoritos, he conseguido una copia de las Utilidades Boston, versión 1.833.4. Incrementan hasta un 20% la velocidad de proceso de datos, y optimizan el espacio de memoria biocuántica, racionalizando la distribución de programas en los módulos

Corr.
> Me da la impresión de que esas utilidades tampoco son legales... Una pregunta, señor Collins: ¿Estoy en la Universidad de Hlanith o en el Caribe de la Era Preespacial? Lo digo por la de piratas que hay sueltos en

D. C.
> Creo que tu verdadera vocación es la de censor, o de tutor espiritual...

Corr.
> Y la suya de personaje de novela de Emilio Salgari, ¿no te fastidia? Permítame un consejo, señor. Dejando aparte la legalidad y la ética, conceptos que tal vez le sean ajenos, los programas piratas son muy peligrosos. La posibilidad de introducir un virus en el ordenador es

D. C.
> No te preocupes; antes de traerlo, me he asegurado de pasar el disco por un antivirus.

Corr.
> No me atrevo a preguntarlo, pero ¿cuál?

D. C.
> Pues la última versión del Turbokiller Mascafé, ¿qué te habías creído? Lo mejorcito de lo mej

Corr.
> ¿¡Ese!? ¡Pero si falla más que una

D. C.
> No seas agonías. Además, el disco de las Utilidades Boston es autoinstalable; lo puedo introducir en el lector y el programa se carga sin tener que abandonar el procesador de textos. Incluso podemos escuchar música al mismo tiempo... La multitarea es maravillosa. ¿Ves? ¡Ya está! Ahora va a optimizar el espacio, y todo ello sin perturbar nuestro trabajo.

Corr.
> Señor, que estos programas piratas los carga el diabl#@#@#@#@#

>

11/5/10 - 09:12 h.

Usuario
> D. Collins

Clave
> Burbudrurbu

CLAVE INCORRECTA. PRUEBE DE NUEVO, POR FAVOR

Usuario
> D. Collins

Clave
> Duruburbu

CLAVE INCORRECTA. PRUEBE DE NUEVO, POR FAVOR

Usuario
> D. Collins

Clave
> Buruburdur

CLAVE INCORRECTA. PRUEBE DE NUEVO, POR FAVOR

Usuario
> D. Collins

Clave
> Buduruburbu

CLAVE INCORRECTA. PRUEBE DE NUEVO, POR FAVOR

Usuario
> D. Collons
[5]

USUARIO DESCONOCIDO. PRUEBE DE NUEVO, POR FAVOR

Usuario
> D. Collins

Clave
> Burdruburbru

CLAVE INCORRECTA. PRUEBE DE NUEVO, POR FAVOR

Usuario
> D. Collins

Clave
> Buduburdurdu

CLAVE INCORRECTA. PRUEBE DE NUEVO, POR FAVOR

Usuario
> me cago en tu padre

USUARIO DESCONOCIDO. PRUEBE DE NUEVO, POR FAVOR

Usuario
>

11/5/10 - 10:02 h.

Usuario
> D. Collins

Clave
> Burdrubrurbu

ACCESO ADMITIDO. SE REANUDA (N) PROGRAMA (S) INTERRUMPIDO (S)

Corr.
> ¡Albricias! Los expertos decían que era imposible dejar colgado durante dos días un ordenador de estas características, pero usted lo ha logrado. ¡Felicidades, señ...! Eh, un momento; o se han averiado las cámaras de la consola, o ha sufrido usted una notable operación de cirugía estética, o

Ruth Jajleel
> Soy la limpiadora encargada de esta planta del edificio, pero deja que te lo explique. Cuando estaba pasando la fregona por el pasillo, me he cruzado con el señor Collins; iba hecho un basilisco y soltando disparates sobre algo llamado Burubudu, me pareció entender. En principio creí que eran blasfemias contra alguna exótica deidad, pero me extrañó en alguien tan mesurado y formal como él. Entonces me di cuenta de que se había dejado la puerta abierta; entré y en cuanto vi la pantalla del monitor deduje lo sucedido. No sé dónde tendrá la cabeza este hombre, mira que olvidar la clave...

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