Read Una monarquía protegida por la censura Online
Authors: Iñaki Anasagasti
Pocos días después del anuncio del compromiso, que se hizo público tras un Consejo de Estado en el palacio de Estocolmo el pasado mes de febrero de 2009, el rey Carlos Gustavo pidió fondos públicos extras al Ministerio de Finanzas, por encima de su asignación anual de 112 millones de coronas —8,7 millones de euros—. Como don Juan Carlos. Pero aquí se los dieron sin chistar.
En cualquier caso, las quejas de la ciudadanía han llegado al Parlamento sueco, y la oposición también se ha sumado a la protesta. Así, el republicano Partido de la Izquierda se ha mostrado públicamente en contra de una financiación pública. El pueblo sueco ya se ha rebelado. Habrá que esperar un año para ver si consiguen no soltar ni una corona para la boda real.
Con esta simpática noticia pongo, pues, fin al presente libro. Ojalá pongamos en circulación por aquí esta buena idea, para ir desmontando toda esa cortina de incienso y humo, de silencio y cabezazos, de mentiras y de censuras, y así la verdadera institución, la más valorada, no sea una herencia de un dictador sino un Parlamento sin cortesanos elegidos por el pueblo, que es su único soberano. Así sea.